ENTREVISTA JUAN PABLO BASTARRACHEA
¡El Cine Tonalá cumple 10 años! Durante esta década se ha consolidado como un referente internacional en cuanto espacios de exhibición y puntos de encuentro. Para esta entrada del Blog CK, platicamos con Juan Pablo Bastarrachea, socio fundador del Cine Tonalá, sobre circuitos culturales de exhibición y la importancia de generar comunidad en los proyectos culturales.
CK – ¿Qué tan importante ha sido la construcción de comunidad para Cine Tonalá?
JUAN PABLO – El cambio que hemos visto en estos 10 años a nivel industria en México es muy impactante, una de las razones o el contexto en el que nosotros empezamos a pensar en Cine Tonalá fue porque yo trabajaba en festivales de cine, empecé trabajando en FICCO, después en Cinema Global y en Distrital. Veíamos como muchísimas películas mexicanas que tenían un paso súper fructífero en los festivales de cine de todo el mundo, llegaban aquí, pasaban en alguno de los festivales y después era muy difícil encontrarlas. Digamos que si no eras el público más entusiasta y festivalero no veías estas películas, y uno de nuestros objetivos era poder llegar al público dándole mayores espacios a las películas y un poquito más pausado. También en ese momento las películas mexicanas estaban un fin de semana en las salas comerciales y las quitaban inmediatamente si es que llegaban a programarlas.
Uno de nuestros objetivos era ser un punto de encuentro entre los realizadores y el público. Lo que hemos visto en estos años es que la producción de cine ha crecido muchísimo, también se ha democratizado y cada vez vemos más producciones, digamos independientes, de muy buena calidad.
Yo creo que el circuito cultural de exhibición está en un momento muy interesante porque tenemos cierta flexibilidad para poder mostrar las películas ya que no tenemos compromisos comerciales muy grandes como es el caso de las grandes empresas y al mismo tiempo las películas están teniendo lanzamientos con ventanas muy cortas o en formatos híbridos que a la par salen en plataformas. Pero también somos más necesarios que nunca, porque al final somos el espacio en donde los directores terminan teniendo estás presentaciones con el público y con la prensa.
Me parece que para nosotros la construcción de la comunidad lo es todo, es el sentido por el que nosotros hicimos este proyecto y nos entusiasma mucho ver que después de 10 años la comunidad es mucho más fuerte, mucho más diversa, al igual que nuestro cine y que cada vez más vemos que el acceso a buenas posiciones laborales en la comunidad es más parejo. Estamos viendo cómo de repente sí nos queda un poco chico ya tener solo una sala, por la cantidad de proyectos que necesitan espacio. Pero cómo se dice “esto es un problema feliz”. El hecho es que la comunidad creció tanto que Tonalá necesito también empezar a ver de qué forma vamos a crecer para poder satisfacer las necesidades de esta comunidad tan pujante.
CK– Ahora que están festejando estos 10 años, ¿Cómo te imaginas que será la transformación en los próximos 10 años para cine Tonalá?
JUAN PABLO – Yo creo que después de todos los cambios en la industria que nos trajo la pandemia definitivamente el futuro y el presente los veo Híbridos, por lo que alcanzó a ver en los hábitos de consumo del público de Cine Tonalá, pues todos tenemos series y películas que constantemente estamos viendo en las plataformas digitales, pero al mismo tiempo sabemos que para poder ver una película tipo “Bardo” o ver una película tipo “Los crímenes del futuro” o “Sanctorum” por ejemplo, por mencionar una película mexicana independiente. Lo ideal es sí poder verla en las salas y en ese sentido nosotros tenemos que garantizar la mejor experiencia cinematográfica que puede tener el público. Afortunadamente en este momento IMCINE ya cuenta con un apoyo a través de FOCINE para la exhibición entonces las salas nos estamos profesionalizando, yo creo que en el futuro en cuanto a hábitos de consumo me parece que va a ser híbrido, también la pandemia ahora está más o menos terminada, creo que todos estamos como muy entusiasmados de las experiencias sociales presenciales y por otro lado no vamos a dejar de consumir contenidos en línea.
Yo creo que el circuito cultural de exhibición definitivamente va a ser cada vez más relevante. Y hay muchos estudios alrededor de eso, sobre cómo los “Micro-Cinemas” (Como se les conoce en otras partes del mundo) se han fortalecido a partir de la pandemia y probablemente otros modelos de exhibición más industrializados si vayan a tener algunas afectaciones justo por la forma en la que estamos consumiendo.
En cuanto a Cine Tonalá, me encantaría que el proyecto continúe creciendo y aportando a la comunidad, no nada más de la Ciudad de México, si no, buscando volver a tener otras salas en otras partes de la república y porque no de otras partes de América Latina, pero después de la pandemia nos hemos enfocado en fortalecer y atender todas las oportunidades que tiene todavía este espacio en el que estamos en la Colonia Roma y tal vez, sí en un futuro estudiar otros proyectos, pero en esté momento estamos concentrados en que este espacio esté lo más fuerte y robustecido posible previniendo cualquier eventualidad.
CK – ¿Qué es lo que más te apasiona de la exhibición?
JUAN PABLO – Míra, te diría que son muchas cosas, yo también vengo del mundo de los festivales, aunque llevo años sin formar parte de uno. La adrenalina que tiene un festival de cine, cuando tienes público e invitados, es una cosa con la que nosotros vivimos constantemente porque la forma en la que programamos Cine Tonalá es muy parecida a la de un festival de cine, nosotros tenemos actividades con invitados prácticamente todas la semanas e intentamos que el público siempre salga enriquecido. Intentamos que la mayoría de las películas tengan alguna actividad especial, ese es parte del proceso creativo que tiene el equipo de programación para determinar cuáles van a ser las actividades especiales que le vamos a dar a cada película, eso me sigue pareciendo muy estimulante. Cuando he podido hablar con el público y me dice lo que ha significado para la gente que vive más o menos cerca de Cine Tonalá el poder estar en contacto con cineastas, con películas que a veces no es tan fácil encontrar y como este lugar se ha convertido en su casa, en cuanto a el consumo cultural, pues eso para mí es sumamente importante pero también cuando nosotros pensamos en Cine Tonalá como proyecto era muy importante el impacto positivo en la comunidad y por comunidad no me refiero nada más a la de cine sino en general a la comunidad en la que nos movemos aquí en la ciudad, y el poder generar empleos, el poder trabajar de la mano, hombro con hombro con todo el equipo de cocina, barra, programación, y también ver como un proyecto cultural puede ser autosustentable y puede ir ofreciendo oportunidades laborales, creemos que pagadas de forma justa y decente, con todas las de la ley, en cuanto a ley de trabajo y todo eso, yo creo que es demostrarnos a nosotros mismos que está narrativa que por muchos años hemos escuchado de que los proyectos culturales no pueden ser negocio o no pueden ser sustentables o que a fuerza tiene que estar el gobierno detrás o una cosa así, pues me parece que también el demostrar que no, que sí pueden funcionar y que nosotros seamos un ejemplo que lo demuestre, pues también es de lo que más me gusta del proyecto, digamos que por un lado es el proceso creativo a la hora de programar y todas las posibilidades que te da como un espacio cultural, el contacto con el público, y aunque a veces se nos olvida y no lo tenemos tan presente, cuando nos dicen lo importante que fue para una persona poder ver, no se, a Lucrecia Martell o a John Waters en la sala, y por último pues tener una pequeña estructura laboral que esté generando empleos, que estemos contribuyendo, me parece que son las cosas las que más me quedo del proyecto.
CK – ¿Cual sientes que es el área de oportunidad más importante de crecimiento de la industria cinematográfica de nuestro país actualmente?
JUAN PABLO – Yo creo que el cambio que ha tenido esta administración del IMCINE a pesar de todos los recortes de cultura y probablemente del poco apoyo Federal de la secretaría de cultura al mismo IMCINE, los cambios que se han hecho, un poco como para poner las bases de un piso más parejo en la industria y que por ejemplo óperas primas, realizadoras, proyectos que no se hacen en la Ciudad de México tengan más oportunidades es fundamental y yo creo que los cambios y los resultados de esos cambios los vamos a ver en los siguientes años, me parece que tendríamos que ver apoyos un poco más grandes en la exhibición para que lugares con poca atención cultural, que hay muchísimos a lo largo del país, puedan tener salas pequeñas que generan empleos que puedan ser la plataforma para que los cineastas locales que estén haciendo cortometrajes, que están haciendo proyectos, que puedan presentar ahí y que no todo dependa un poco como de la Ciudad de México, del sistema que está súper centralizado y obviamente tampoco de los grandes exhibidores, entonces me parece que el área de oportunidad principal sería un circuito cultural exhibición más fortalecido, más diverso y más descentralizado.